Ya ni recuerdo cuándo fue el último post rolero (¡desde Abril!), y aquí voy con uno en el que voy a explicar diversas cuestiones. Como algunos sabréis, la Dungeon Aventura titulada «Nóivern, La Ciudad Partida en Tres«, quedó en tercer lugar en el último concurso Adventure Kingdom de OkGames. Llevo tiempo sin pasarme por el foro de la editorial y sin poder mirar blogs y otras cosas, así que no sé cómo irá el tema de la maquetación de la aventura ganadora, yo aún no he recibido noticias de TheDuelist para maquetar virtualmente la mía. Tengamos paciencia, las cosas de palacio van despacio.
Pero mientras tanto, yo ya no he podido resistirme, y viendo que en lo que llevamos de verano he jugado más veces a rol que en el resto de curso escolar les ofrecí a mi grupo habitual si apetecía probar mi Nóivern. Hacer de Master en esta partida fue extraño y diferente, cuando en realidad no se diferenciaba en esencia de las otras partidas que he dirigido. El juego era nuevo para todos los jugadores, y como sabréis los que seguís este blog y Sombras del Sol, yo solo he dirigido antes una partida a dungeons, así que aún me olvido de bonificadores, penalizadores, tiradas de salvación y toda esa serie de cositas que tiene el D20…
Bueno, ¿efectos en los jugadores? Una de ellas dijo que no le mataba el juego, supongo que el tema de la fantasía y de que guste no está al alcance de todos, aunque la vi desenvuelta en la partida. De los otros cuatro solo me hizo falta ver cómo berreaban en la dungeon y daban saltos de alegría tras un doble crítico del bueno del Pícaro del grupo para entrever que les estaba molando. Luego comentaron cositas, aunque falta una reflexión profunda tras una birra para acabar de saber qué les moló y qué no.
Yo puedo hacer mi reflexión. Vi en funcionamiento la ciudad, el tema principal de la crónica, vi cómo algunos de los ganchos funcionaban a las mil maravillas, y me sorprendí al ver que todo parecía encajar de una manera bastante consecuente. Normalmente yo escribía el esqueleto de las crónicas que dirigía en mi cabeza, y con el transcurso de las partidas y las acciones que los personajes llevaban a cabo, cambiaba algunas cosas para que encajaran mejor o metía alguna subtrama extra para acabar de redondearlo todo. Supongo que el tenerlo todo escrito me ha dado una seguridad a la hora de dirigir que antes no había tenido, incluso dirigiendo campañas publicadas de otros juegos.
Una experiencia muy interesante que me llenó de un especial orgullo, como siempre por ver el resultado esperado (o incluso superando las espectativas) en los rostros de los jugadores, y por el hecho de poder jugar una crónica «galardonada» en el concurso de OkGames.
Gracias por venir a los jugadores, en Agosto nos espera otra aventura por los angostos callejones de La Ciudad Partida en Tres.
¡Un abrazo!
PS: No os confundáis, desgraciadamente aún no tengo internet en casa, pero estos días he estado bajando a la universidad y robando wifi como un poseso. Queda Nexo de Caminos para rato, don’t worry.